Los parques infantiles de la Vall de Boí
Los espacios ideales para familias con niños pequeños.
Son muchas las familias con niños de entre 0 y 10 años que aprovechan para hacer una escapada entre semana o los fines de semana buscando destinos tranquilos, seguros y con buenas opciones para los más pequeños. En la Vall de Boí, los parques infantiles son una pieza clave para hacer que la experiencia sea cómoda y divertida.
Cuando los niños viajan y exploran nuevos lugares, no solo quieren conocer rincones diferentes y disfrutar de las visitas turísticas, sino que también desean tener su propio espacio de diversión. Un lugar donde pueden dejar volar la imaginación, hacer nuevos amigos y conectar con otros niños. Es en estos momentos cuando los parques infantiles y las zonas de esparcimiento de la Vall de Boí se convierten en el punto de encuentro perfecto, donde los más pequeños pueden disfrutar de juegos, aventuras y nuevas experiencias mientras descubren el entorno que los rodea. Un espacio pensado para niños abiertos a todo, que quieren compartir risas, curiosidad y momentos inolvidables con otros compañeros de juego.
En este blog queremos animaros a descubrir los diferentes parques infantiles que encontraréis repartidos por los pueblos del valle: espacios integrados en la naturaleza, equipados para todas las edades e ideales para complementarlos con un día de senderismo o una visita cultural
Parque de Barruera, el deporte y la naturaleza
El parc de Barruera el trobareu situat a la vora del riu Noguera de Tor. Un lloc perfecte per passar un dia en família a la Vall de Boí ja que a Barruera trobareu tot el que necessiteu. Es tracta d'un espai ideal per als més petits (i no tan petits), un indret ampli, segur i envoltat de natura, amb gronxadors, tobogans i altres jocs que conviden a hores de diversió.
Just al costat, la zona de pump track i skate park afegeix un extra d’emoció per als més grans i per als més aventurers. Tant si els vostres fills ja són hàbils damunt la bicicleta, el patinet o l’skate, com si simplement volen provar-ho per primer cop, aquest espai és perfecte per practicar i passar una bona estona. En aquest espai també trobareu una llarga tirolina i un llit elàstic, que complementa tota aquest espai.
I si la gana apreta? A prop trobareu diversos serveis on podreu menjar de meravella, des de bars i restaurants fins a zones habilitades per fer una autèntica barbacoa a l'aire lliure. Imagineu un bon àpat en família envoltats de natura amb el so suau del riu Noguera de Tor de fons... Hi ha millor pla per fer amb la família?
El riu mateix és una font inesgotable d'entreteniment: des de veure com els pescadors practiquen la pesca esportiva fins a remullar-se els peus o bé fer d'exploradors. Una oportunitat d'or perquè els petits connectin amb la natura de manera directa i divertida.
No podeu marxar d'aquest espai natural sense fer una passejada pel Salencar de Barruera. Aquest itinerari fàcil i planer us portarà per un entorn espectacular de prats, boscos de ribera i aiguamolls, on podreu observar ocells i altres animals. És una ruta pensada per a totes les edats i adaptada per fer-la amb carret de nadons, així que tant els més petits com els adults la gaudiran al màxim.
Així doncs, ja veieu que Barruera us ofereix moltes possibilitat, fent-vos sentir com a casa, amb el valor afegit de tenir la muntanya a tocar i mil oportunitats per viure moments màgics en família.
Parc de Durro, patrimonio de gran altura
En Durro encontraréis un rincón especial donde combinar juego, naturaleza y cultura, que os cautivará desde el primer momento. En el patio de las antiguas escuelas, encontraréis este parque infantil, un espacio pequeño pero muy acogedor y familiar, pensado para que los niños se diviertan al máximo. Inspirado en las Falles, la fiesta tradicional declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, el parque recrea este espíritu festivo tan arraigado en la Vall.
A pesar de su tamaño reducido, el parque ofrece todo lo necesario para una buena dosis de diversión: columpios, estructuras para escalar y, sobre todo, un ambiente encantador en medio de un pueblo que parece detenido en el tiempo.
Después de jugar, os recomendamos dar un paseo suave de unos 20 minutos (fácilmente transitable con carritos de bebé) hasta la ermita de Sant Quirc de Durro. Desde allí, las vistas son sencillamente espectaculares: uno de los mejores miradores de toda la Vall de Boí, donde la paz y la belleza del paisaje os dejarán sin palabras y donde os sentiréis "donde los Pirineos tocan el cielo".
Durro forma parte de la selecta lista de los Pueblos Más Bonitos de España, y no es por casualidad. Pasear por sus calles empedradas y sinuosas es todo un viaje al pasado, entre casas de piedra, rincones llenos de encanto y la esencia pura del Pirineo. Si os animáis, daos una vuelta por el pueblo.
No podéis marcharos sin visitar la iglesia románica de La Natividad, una joya arquitectónica que domina el pueblo con su imponente campanario, que parece daros la bienvenida desde cualquier rincón. Un lugar ideal para descubrir en familia, con calma, dejándoos llevar por el ritmo tranquilo de este tesoro pirenaico.
Parque de Erill la Vall, la cuna del Románico
En Erill la Vall, las familias encontrarán un espacio mágico para disfrutar del juego, la naturaleza y el patrimonio. El parque infantil está ubicado en la plaza del Tarter, justo por encima de la pista polideportiva, y os invita a vivir la tranquilidad y calma del pueblo de Erill la Vall.
Aquí, los niños podrán subir hasta lo alto de un campanario románico (¡adaptado a su tamaño!) y bajar por un tobogán divertidísimo. También hay un columpio redondo, perfecto para compartir con hermanos o amigos y dejar volar la imaginación. Para los pequeños músicos, una zona de tambores permitirá experimentar sonidos y ritmos al aire libre.
Además, justo debajo del parque, tendréis a vuestro alcance la pista polideportiva para seguir disfrutando aún más: jugar al fútbol, hacer unos tiros a canasta o inventar nuevos juegos en equipo. Se trata de un gran espacio donde podréis dejar volar vuestra imaginación en cuanto a juegos.
Y si queréis completar la jornada con un poco de naturaleza, os proponemos una paseada hasta el mirador del Tussal del Comú. En pocos minutos llegaréis a un balcón natural con vistas espectaculares: Boí enfrente, al fondo la estación de Boí Taüll y el Pla de l'Ermita dibujando un paisaje de postal, en esta encrucijada de valles.
Un espacio ideal para que grandes y pequeños compartan risas, aventuras de pequeños grandes caballeros y momentos inolvidables rodeados de la magia del Románico y la grandeza de los Pirineos.
Parque de Boí, jugando en el corazon del Parque Nacional
Situado a orillas del río, el parque de Boí es un espacio tranquilo y agradable tanto para los niños como para los padres. En un entorno natural único, inspirado en la exuberante naturaleza del Parque Nacional de Aigüestortes, este parque invita a los más pequeños a imaginar sus propias aventuras mientras exploran todos los rincones y actividades que ofrece. Los padres, con vista directa a los juegos, pueden vigilar atentamente a los más pequeños mientras se relajan y disfrutan de una buena charla y de la compañía.
El parque es un lugar perfecto para disfrutar de un rato de juego en plena naturaleza, rodeados de paisajes espectaculares y del ambiente tranquilo del río.
Para complementar la visita, si queréis estirar las piernas, justo al lado del parque encontraréis el camino del agua, señalizado y de fácil recorrido. En pocos minutos, llegaréis al Mirador del Tussal Gran de Boí, un espacio ideal para descansar mientras disfrutáis de unas vistas espectaculares del Aüt y la zona de Caldes, con Erill la Vall justo enfrente. Un lugar perfecto para combinar naturaleza, deporte y relajación en familia.
Parque de Taüll, jugar bajo las estrellas
En la entrada del pintoresco pueblo de Taüll, uno de los Pueblos con Encanto certificado por la Agencia Catalana de Turismo, en una zona segura y tranquila cerca del aparcamiento, encontraréis un parque infantil muy especial. Inspirado en la certificación Starlight —que reconoce la Vall de Boí como uno de los mejores lugares del mundo para observar el cielo nocturno— este espacio invita a los niños a jugar, descubrir y dejar volar la imaginación a través de los diferentes planetas.
Aunque no es un parque muy grande, ofrece una gran variedad de actividades: juegos de habilidad, formas y colores que estimulan los sentidos y desafían las habilidades motrices de los más pequeños. Siempre bajo la vigilancia de los padres, los niños pueden moverse y disfrutar con total seguridad.
Y como gran protector, al fondo, la iglesia románica de Sant Climent de Taüll, imponente y serena, parece velar por los juegos y risas de los niños, recordándonos la magia histórica de este rincón único. En su interior podréis disfrutar del video mapping, un audiovisual que recrea las pinturas originales y que gusta a todos.
Para completar la aventura, podéis disfrutar de una pequeña caminata desde el parque, con vistas fantásticas sobre el fondo del valle, una manera perfecta de combinar juego, naturaleza y cultura en vuestra visita a la Vall de Boí.
Parque de El Pla de l'Ermita, muy cerca de las montañas
En el corazón del Pla de l'Ermita, el parque infantil más alto de la Vall de Boí se presenta como un espacio deportivo y lúdico pensado para toda la familia. Aquí, donde se encuentra el Centro de Acogida del Outdoor Park de la Vall, se pretende aglutinar toda la actividad deportiva de la zona, ofreciendo un entorno activo y vibrante en plena naturaleza. Como complemento y parte del proyecto, también podréis disfrutar de un camino experiencial que os acompañará en una experiencia de disfrute aún mayor.
El parque, amplio y lleno de vida, cuenta con una gran variedad de juegos: una divertida tirolina, columpios, toboganes y amplios espacios donde practicar deportes en equipo o jugar libremente. Tanto si venís con niños pequeños como con jóvenes con ganas de moverse, encontraréis actividades para todas las edades.
A pocos minutos del parque, podréis llegar hasta el Mirador de la Glorieta, un balcón natural que os regalará una panorámica espectacular de las montañas y una preciosa vista sobre el pueblo de Taüll.
Un lugar ideal para combinar deporte, juego y naturaleza, donde el tiempo parece detenerse y cada momento se convierte en una pequeña aventura en familia.